Iván Rivera (voz), Cristian Baz (voz, guitarra), Miguel Costa (voz, bajo) y Beni Herrero (batería) empezaron un proyecto en el que «nos divertimos mucho juntos e intentamos hacer algo especial en el proceso». Rozando un lustro de trayectoria, RYMER es un cuarteto forjado entre Arteixo e Vigo que irrumpía en la escena metal gallega con una potente mezcla de metalcore agresivo y deathcore intenso. Tras meses de adelantos, la banda publicaba su primer disco, slowdance (2023), al completo a principios del pasado noviembre.

Entre las tierras de Arteixo y las costas de Vigo hay más de 170 km de distancia... ¿cómo «acortasteis» estas distancias para dar vida a la banda?

Cristian Baz: «El grupo nació de la idea de Miguel e Iván de montar algo juntos, ya que sus respectivos grupos anteriores estaban prácticamente muertos. A partir de ahí, convencieron a Beni (parte importante junto a Miguel en su grupo anterior) para que se uniese, y yo probé recomendado por un colega, ya que no nos conocíamos personalmente.

El primer día conectamos mucho tocando y empezamos este proyecto con el que nos divertimos mucho juntos e intentamos hacer algo especial en el proceso».

Por cierto, una cuestión de tipo práctico, ¿cómo solucionáis el tema logístico? ¿Dónde soléis ensayar?

Cris: «Iván y yo vamos hasta Arteixo normalmente, ya sea para ensayar, grabar o incluso echar unas partiditas de Magic. Importante decir que somos amigos más que compañeros de grupo y, ya que quedamos, aprovechamos para hacer cosas juntos.

Ensayamos en el estudio de Miguel, en el que también grabamos y pasamos la mayor parte del día».

Sabemos que antes de juntaros en RYMER, alguno de vosotros formabais parte de otros grupos. ¿De qué modo influyó este bagaje previo a la hora de conformar el nuevo proyecto?

Cris: «El hecho de ya tener esta experiencia facilitó mucho las cosas para saber qué queríamos y qué no para este grupo.

Ya desde el primer día la idea era trabajar en algo en el que habíamos estado todos el 100% involucrados y contentos. Fácilmente echamos cerca de un año, sin ninguna prisa, quedando y componiendo cosas para dar con el camino correcto. La primera piedra del camino sería “Lavanda”, el primer tema que compusimos y también primer tema en el EP y nuestros conciertos».

Entre la agresión del metalcore y la intensidad del deathcore... ¿dónde caería el metal, y el core, de RYMER? ¿Cómo definiríais vuestro sonido?

Cris: «Esencialmente somos un grupo de metal, sin muchas volteretas. Igual hay uno más metalcore, otro medio death metal o sale alguno más progresivo, pero al final del día vamos jugando un poco con eso y lo que va saliendo según la mezcla del trabajo de todos.

Es difícil de definir, pero supongo que es música agresiva pero también bastante emotiva».

Musicalmente hablando, respecto a vuestras influencias, ¿a quién señalaríais como referentes?

Cris: «Lo guapo de este grupo es que no tenemos referentes claros en cuanto a lo que queremos hacer. Cada uno es un mundo con respecto a sus influencias y, aunque al principio era un poco tedioso con cada uno tirando hacia su lado en el ámbito compositivo, ahora ya hemos aceptado que todo es mejor cuando cada uno acerca su movidita en el tema.

Hace tiempo hicimos una playlist con aportaciones de todos en cuanto a gente que nos inspiró en el mundo del metal, pero va siendo hora de hacer una general con cosas más guapas y de más estilos».

A principios de noviembre veía la luz vuestro primer trabajo, slowdance (2023), un EP del que escuchábamos hablar de él por primera vez... en 2019, con el lanzamiento de “Brainsu”. Obviando los tiempos pandémicos que nos tocaron vivir... ¿por qué la demora entre el primer sencillo y la publicación del álbum? Ya que la nombramos, ¿cómo afectó la pandemia al desarrollo del álbum? Porque vemos que en 2020 sacasteis otro par de sencillos...

Cris: «Pues precisamente el tema de la pandemia afectó bastante a la forma de trabajar del grupo, ya que pasamos de dar nuestros primeros bolos juntos a no poder vernos las caras en la vida real durante mucho tiempo. Seguimos trabajando, aunque despacio por la falta de motivación, pero eventualmente fuimos perfeccionando la forma de crear juntos (y lo seguimos haciendo).

Igualmente, hoy en día los álbumes ya no funcionan muy bien con respeto a los sencillos en el mundo del streaming: sacar equis temas a lo largo de un tiempo funciona bastante mejor que sacarlos a la vez y también es más sostenible de cara a la ver resultados y alimentarnos de esa motivación supongo».

Días antes del lanzamiento de slowdance, Nik Nocturnal, un artista metal de Toronto (Ontario, Canadá) que comparte reacciones y críticas en sus canales de YouTubey Twitchseguidas por cientos de miles de personas, no tuvo más que elogios para “Cathedral”, uno de vuestros últimos sencillos adelanto. ¿Qué sentisteis al escuchar sus palabras?

Cris: «La verdad es que motivó bastante que alguien tan ajeno a nuestro pequeño “ecosistema” llegase a escuchar un tema nuestro y lo valorase como si hubiese escuchado a cualquier banda megagrande... como hace normalmente».

Al hilo, durante su review, hizo una interesante anotación, comentando que, hoy en día, los medios de comunicación pasan por alto a bandas, en su mayoría, si no tienen una buena estrategia de comunicación detrás o un gran sello o management. Concluía diciendo que, actualmente, los grupos no deberían tener que necesitar nada de eso para ser conocidos, solo hacer «temazos». ¿Qué opináis vosotros sobre esto?

Cris: «Si solo tuviésemos que concentrar nuestros esfuerzos en crear música y nada más, la cosa estaría más divertida, pero sí que desmotiva un poco el componente de convertirlo en producto y depender de cierto factor de suerte o “viralización” para tener más exposición. Igualmente, es entendible cuando cada semana hay 100 temas nuevos en novedades y tenemos que juzgar grupos que quizás no conocemos en tan sólo unos segundos para “aprovechar” bien el tiempo».

Decís que esta canción, “Cathedral”, llevará al oyente por todo un remolino de emociones. ¿Cómo conseguís que, quien la escucha, pueda sumergirse en él?

Cris: «Esta canción nació de la inspiración en las bandas sonoras de los videojuegos de From Software, particularmente Dark Souls III y Elden Ring.

En estas obras, fácilmente el 80% del tiempo transcurre sin una sola nota musical sonando de fondo pero, eventualmente, en las batallas importantes, aparecen piezas orquestales megaintensas y épicas para la ocasión. Este tema es nuestro intento de trasladar esa emoción y epicidad al metal y nos alegra ver que puede motivar de una manera similar a la gente que nos escucha».

El tema que da nombre al EP, “Slow Dance”, reproduce la ansiedad social que puede llegar a experimentar alguien al estar de fiesta con una yuxtaposición de voces muy distintas con el apoyo de la base rítmica. ¿Cómo de complicado es el proceso de traducir sensaciones a canciones?

Cris: «Muchas veces empezamos temas que ya de primeras tienen detrás conceptos o títulos que puedan dar pie a la idea o sensaciones que queremos transmitir, pero otras veces simplemente es algo que evoluciona a medida que trabajamos en la grabación del propio tema y experimentamos con él.

La idea inicial de “Slow Dance” era que fuese un tema lleno de partes para dos vocalistas, y cuando tocamos esta canción en directo siempre invitamos a alguien para que defienda las partes de bajo en ella, para que así Miguel e Iván puedan gritar juntos con toda la rabia y libertad posibles».

Hablando de procesos, ¿cómo trabajáis los temas? Es decir, ¿cómo van creciendo desde que nacen cómo idea (o riff, letra, etc.) hasta su forma final?

Cris: «Generalmente alguno de nosotros pasa una idea más o menos desarrollada, proponemos cambios para hacerla algo más RYMER y, cuando ya tiene una estructura decente, nos ponemos con las letras. Hecho esto, nos juntamos unos días y nos ponemos con la grabación.

Terminada la cosa, experimentamos un poco ya que estamos, y cuando ya estamos hartos de darle vueltas, mandamos el tema a mezclar y masterizar. Si todo suena como queremos, ya estaría (y sino, a darle unas vueltas más)».

“To Those Who Found And Had To Let Go” venía acompañado de un vídeo dirigido por Iago Vilarinho con Bego Pardellas como protagonista. ¿Cómo recordáis su grabación?

Cris: «Por ser este el primer vídeo del grupo, nos aseguramos de que fuese acompañado de un tema y concepto que funcionasen bien para esto. Con la actuación de Bego, el trabajo de Iago y todo el trabajo detrás con gente que queremos mucho, fue un proceso duro pero también bonito».

Ese tema tenía aires algo nostálgicos, que se trasladan al vídeo en forma de fotografías. ¿Qué, o quien, inspira las letras del EP?

Cris: «“To Those Who Found and Had to Let Go” está inspirado por la historia del documental Santoalla (Daniel Mehrer, Andrew Becker, 2016) que hace poco fue llevada al cine con la película As Bestas (Rodrigo Sorogoyen, 2022); una historia sobre la crueldad del mundo en el que vivimos y la aceptación de este.

La mayoría de las letras están basadas en conceptos bastante humanos como pueden ser la aceptación en “TTWFAHTLG”, el dilema determinista en “Stay” o la dificultad de ser uno mismo en la sociedad actual en “Is This Even Me?”».

Para alguien que todavía no pudiese vivir la experiencia de ir a un concierto vuestro, ¿cómo lo describiríais?

Cris: «Somos cuatro tipos reventando el escenario, intentando de hacer que esa rara oportunidad de tener una audiencia en directo sea una carta de presentación de nuestra música inolvidable. ¡También hacemos un poco el parvo entre medias!».

¿Cuándo podremos disfrutar de slowdance en directo?

Cris: «Ahora mismo estamos trabajando en cosas fresquitas que, con suerte, verán la luz este año... pero si algún festival cercano a vosotros nos llama, ¡allí vamos a estar bien felices haciendo lo que nos gusta!».

En la actualidad, ¿qué artista o grupo gallego nos recomendaríais? ¿Algún favorito que deberíamos conocer?

Cris: «Dreadcult sacaron un EP tremendo hace poco, pero lo que hace Bleidd también va durísimo. Turbo Kraks son fácilmente el mejor grupo de Galicia y, si tenéis la oportunidad de ver la Verbose en directo, recomiendo ir corriendo».

Si abriésemos vuestras cuentas personales de Spotify, ¿qué escucharíamos? 100% Sinceridad, 0% Vergüenza

Cris: «Ahora mismo está entre la banda sonora del nuevo Tekken, los últimos discos de Spanish Love Songs y Vitriol, y los últimos singles de Hiatus Kaiyote y Bilmuri».