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JUAN CASTRO: «PARA MÍ ESTE DISCO ES UN SALTO SIN RED, UN SALTO SIN ESPERAR NADA»

JUAN CASTRO: «PARA MÍ ESTE DISCO ES UN SALTO SIN RED, UN SALTO SIN ESPERAR NADA»
7 OCTOBER 2024

Aunque el proyecto es de reciente creación, él es todo un veterano en el mundo de la música. Conocido anteriormente como el compositor y vocalista de Maldito Murphy, Juan Castro se presenta ahora en solitario. Acompañado de su guitarra, el vigués abraza de lleno la oportunidad con la que se encontró —«no fue una cosa premeditada»— para dar el «salto» más personal de su carrera. Salto al vacío (2024) es el primer disco de esta nueva etapa en la que firma bajo su propio nombre; un EP que saca a relucir un Juan Castro desconocido hasta el momento.

 

 

 

Aunque eres reconocido por ser el compositor y vocalista de Maldito Murphy, ahora te presentas en solitario. ¿Qué propició este giro en tu carrera musical?

Juan Castro: «En realidad no fue una cosa premeditada, me encontré con ella.

A finales de 2022 principios de 2023, en una reunión de Maldito Murphy me encontré con un frenazo en seco e inesperado del grupo. Sin saberlo, los demás miembros del grupo querían parar un poco la maquinaria. Me quedé un poco en shock, no contaba para nada con esto; pensaba que grabaríamos un par de singles nuevos a principios de 2023 y seguiríamos girando ese año.

En fin, en su momento fue un golpe duro y también una decepción».

 

¿Qué efectos dirías tú que tuvieron todos esos años como parte de la banda a la hora de afrontar este nuevo proyecto en solitario?

Juan: «Muchos; aprendí mucho con la banda y, sobre todo, aprendí a como no hacer las cosas. A corregir errores, por ejemplo, a poner las canciones en los tonos que mejor vayan a mi tesitura de voz... Ahora lo veo desde la distancia y veo que cantar en esos tonos tan graves en Maldito Murphy fue un lastre. Creo sinceramente que marcó ese estilo tan lánguido que teníamos y, la verdad, creo que no nos favoreció.

Si escucho Horizontes (2021), el segundo disco de Maldito Murphy, pienso que esas canciones uno o dos tonos por arriba hubieran ganado una luminosidad y una fuerza que le habrían dado al disco mucha más frescura y habrían hecho que el disco fuera más fácil de escuchar. Pero bueno, en eso consiste ya no solo la música, sino la vida, en ir cometiendo errores e ir corrigiéndolos en las siguientes ocasiones...».

 

 

¿Musical, e personalmente, cómo definirías este nuevo paso en tu trayectoria? ¿Qué significa para ti?

Juan: «Musicalmente es una evolución, aunque no sé si llamarlo evolución porque, en realidad, volví a lo que más me gusta que es la música mas británica. Ese rollo tan americano con tintes country del primer disco de Maldito Murphy me pesó mucho estos años; estaba cansado de eso y cuando decidí hacer mi disco era el momento para dejarlo atrás.

Personalmente, era un reto enfrentarme yo solo a todo. No sabía si sería capaz de hacerlo, tomar todas las decisiones yo, sin consultar con nadie. Fue todo como muy nuevo, pero muy emocionante. Nunca estuve tan nervioso con ningún lanzamiento de Maldito Murphy como con este disco o con cada adelanto».

 

 

 

 

Te lanzas a esta nueva aventura en solitario cun disco, Salto al vacío (2024), disponible desde julio pasado. ¿Cómo surge la idea del disco? Es decir, ¿comenzaste a componer piezas con la intención de recogerlas en un EP o simplemente... fue fluyendo el proceso?

Juan: «Cuando me encontré con el parón del grupo al principio me quedé en shock, pero poco a poco empecé a barajar la idea de hacer un disco en solitario, aprovechar ese tiempo que me quedó libre para hacer algo.

Así que, después de pensarlo un tiempo (soy muy indeciso), decidí que iba a hacer un disco pero empezando de cero. Me refiero a que tenía canciones escritas para Maldito Murphy, pero quería romper con el pasado; así que empecé a escribir canciones para este disco, no quería aprovechar ninguna que tuviera escrita anteriormente, fue la condición que me impuse a mí mismo.

Recuerdo que la primera canción que escribí para el disco fue “Cuando ya no queda nada de lo que huir” y me pareció una buena manera de arrancar y eso me dio alas».

 

En “A paso cambiado” dices «saltaré solo al vacío en un salto sin red con la adrenalina a flor de piel». Este tema y el título del disco son toda una declaración de intenciones... ¿no?

Juan: «Sí, sí, el título del disco está sacado de esta canción. Cuando la estaba escribiendo y me salió esa frase que tú comentas me dio el título del disco, no lo busqué, me lo encontré y bueno, definía muy bien lo que era para mí este disco. Un salto sin red, un salto sin esperar nada, solo esperar y a ver qué pasa».

 

 

En ese mismo tema hablas de «una guitarra muda en un rincón». ¿De qué forma lograste que la guitarra comenzase a hablar de nuevo? ¿Cómo fue el proceso creativo?

Juan: «Pues lo que te decía antes, empezar a escribir canciones a propósito para el disco. Hay una cosa importante que no dije y es que escribí más libremente que en el pasado, ya que las canciones solo me tenían que gustar a mí, y escribí sin ataduras, lo que me saliese. Si me gustaba la canción daba igual el estilo, lo que pasa es que al final todas salieron de forma natural con ese estilo».

 

 

Sabemos que, excepto la batería, tomaste tú las riendas de todo, ¿por qué hacerlo así?

Juan: «Primero por una cuestión económica y, segundo, porque quería que sonase lo más personal posible; si lo grababan otros músicos eso se perdería. Yo no toco muy bien ningún instrumento, pero me defiendo con la guitarra, el bajo, el piano y teclados, y creo que esa forma de tocar le favorece a mis canciones.

Y con la producción y la mezcla pasa lo mismo; yo tenía la idea de cómo me gustaría que sonase en mi cabeza».

 

El álbum se aproxima al pop rock, a un sonido británico que se aleja claramente de la americana y el country al que estábamos acostumbrados. ¿Cómo definirías esta evolución en tu sonido?

Juan: «Bueno, no es una evolución en sí, es volver a lo que siempre me gustó y a mis influencias de toda la vida. Lo del country fue algo un poco pasajero, aunque bueno, no diré nunca jamás porque igual el siguiente disco (si es que hay) me sale de rollo americano otra vez. También depende mucho del momento y de lo que esté escuchando; en este caso había vuelto a escuchar a los Smiths y a Morrissey, por ejemplo, que los tenía un poco abandonados.

Soy bastante esponja y me dejo influenciar muy fácilmente, así que igual en una temporada vuelvo a escuchar a Dylan en bucle y hago un disco de guitarra y armónica rollo folkie... Ya te digo me cala mucho lo que este escuchando en el proceso creativo o los meses anteriores a ese proceso».

 

 

Además del sonido, otro de los cambios es el registro vocal, ya que escuchamos una voz más aguda, no tan grave. ¿Qué dirías que aporta este tono, más próximo a tu voz natural, al proyecto?

Juan: «Le da más fuerza a las canciones, más frescura y naturalidad pero, sobre todo, estos nuevos tonos me dan a mi más seguridad a la hora de cantar. De entrada, porque me reconozco más y también porque estoy más cómodo, ya que es un tono más próximo a mi voz natural como tu bien comentas; cantar más abajo me resulta difícil y antinatural y, sinceramente, no me gusta.

Hay grupos con la voz muy impostada y no me resultan creíbles, no me gusta, uno tiene que cantar con la voz que tiene y no con la que le gustaría tener... es mi opinión».

 

Lo primero que escuchábamos de Salto al vacío fue “A veces pienso en ti”, ¿por qué escoger esta pieza en concreto como adelanto?

Juan: «Bueno, me parecía una buena canción de presentación y además es la que enlaza un poco el pasado con esta nueva etapa, a mi es la que más me recuerda a Maldito Murphy.

Creo sinceramente que es una buena canción, me gusta mucho como empieza con esas dos primeras frases: “he mentido alguna vez mas de la cuenta, he olvidado el camino hasta tu puerta”... me gustan mucho».

 

 

Compusiste un puñado de canciones específicamente para este proyecto, pero solo seis pasaron a formar parte del disco. ¿Cómo fue el proceso de selección?

Juan: «Escribí quince canciones; podría haber hecho un disco de diez temas pero, la verdad, para el primer disco me parecía demasiado. Quería algo más conciso y ahora todo es de un consumo tan inmediato que, de diez, la gente escucha cinco (si las escucha).

Así, el disco es muy fácil de escuchar entero —creo que en total dura veintitrés minutos— y ese formato de seis canciones me gusta mucho».

 

Podría caer en este saco “Sin rumbo conocido”, un tema que incluiste cuando publicaste “El final” —el sencillo que precedía la salida del disco— pero que no pasó el corte final. ¿Por qué no incluirlo en el disco, pero sí lanzarlo como “cara B”?

Juan: «Sí, esa canción es una de esas quince pero, como te decía, quería que el disco tuviera seis, así que tenía que escoger. El proceso de selección por el que me preguntabas antes fue escoger las que más me gustaban, no hubo otra premisa».

 

 

Como comentábamos, todas las letras son de tu autoría excepto “Tu marioneta”, para la que echaste mano de Óscar Álvarez. ¿Por qué él? ¿Cómo acabó por desarrollarse esta colaboración inesperada?

Juan: «Llevaba meses con la letra de esa canción y tenía una estrofa y el estribillo escritos, pero no me salía más, cada vez estaba más atascado. Al final tomé la decisión de pedirle ayuda a mi amigo Óscar, que ya me había escrito alguna letra en una época anterior a Maldito Murphy, y siempre me ha gustado cómo escribe; tiene una facilidad innata para escribir.

Lo llamé, se lo comenté, le envié la canción con lo que tenía y le di unas pautas para situarlo y supiese de lo que estaba hablando en lo que yo había escrito. Al día siguiente me trajo la letra, retocamos un par de cosas... y ya; así de fácil lo hace, me maravilla esa facilidad».

 

 

Aunque los títulos puedan sonar nostálgicos, las letras vienen envueltas en una especie de... ¿esperanza, quizás? ¿Qué, o quién, las inspiró?

Juan: «Sí, no sé, sinceramente me gusta dejar la interpretación a la gente que las escuche; a cada persona le sugerirá una cosa, así que es mejor dejar la libre interpretación. Pero bueno, sí, las letras hablan de amor, desamor, de huir...

“A paso cambiado” habla claramente de cuando decido hacer el disco después de encontrarme con el parón de Maldito Murphy y todo eso; “Tu marioneta” habla de adicciones... En fin, hay un poco de todo».

 

 

Somos conscientes de que, aunque es pronto, pero no podemos evitar preguntar: ahora, con el disco en la mano después de tantos meses de trabajo, ¿valió la pena saltar al vacío»? ¿Qué podemos esperar de Juan Castro en un futuro no muy lejano?

Juan: «Sí, sí, valió mucho la pena; verlo en plataformas o tener el CD en la mano y pensar que lo he hecho yo solo me llena de orgullo.

Me parece increíble haber sido capaz de hacer yo todo esto... Cuando hablo del disco en entrevistas como esta es cuando me doy cuenta, a veces se me olvida que lo he hecho yo todo, el diseño gráfico también.

En un futuro cercano mi intención es presentarlo en directo».

 

¿Cuándo, y dónde, podremos disfrutar de Salto al vacío en vivo? ¿De qué forma has pensado subir el disco al escenario?

Juan: «Pues mira esto es una primicia porque aún no lo he anunciado, pero voy a subirme al escenario por primera vez yo solo el 16 de noviembre en A Casa de Arriba, en Vigo.

Será un concierto en acústico, yo solo con mi guitarra; quiero seguir enfrentándome a hacer esto solo, así que decidí que este primer concierto sea así. Haré unos cuantos así en este formato, la verdad es que me apetece mucho. Más adelante ya se verá, pero de momento será así».

 

 

En la actualidad, ¿qué artista o grupo nos recomendarías? ¿Algún favorito que deberíamos conocer?

Juan: «No sé, hay varios, pero si tuviera que escoger me quedaría con The War on Drugs, el disco A Deeper Understanding (2017) es mi disco de cabecera; me parece buenísimo, es del 2017 pero lo sigo escuchando mucho. Los vi en directo y no lo olvidaré jamás».

 

¿Y gallego?

Juan: «Pues artista gallego, no tengo dudas, Eladio Santos, que acaba de sacar también su primer disco en solitario. Y su grupo, Eladio y Los Seres Queridos, también por supuesto; me parece el tipo con más talento de por aquí. Además, tengo la suerte de tener una cierta amistad con él y de haber compartido escenario varias veces ¡un lujo!».

 

Si abriésemos tu cuenta personal de Spotify, ¿qué excucharíamos? 100% Sinceridad, 0% Vergüenza.

Juan: «Pues mira, voy a ser sincero, es una mezcla de todo un poco. El London Calling de The Clash, A Deeper Understanding de The War on Drugs que te comentaba, el último disco de estudio de Mikel Erentxun, que se llama Septiembre y es un disco increíble producido por Víctor Cabezuelo (Rufus T. Firefly) y Daniel Ruiz (Reme); un discazo de arriba abajo. Y ahora que van a volver Oasis he empezado a escucharlos de vuelta, es otro de mis grupos favoritos; tengo toda su discografía doblada en vinilo y en CD. ¡Ah! Y también estoy escuchando una lista variada de los 80».

 

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